miércoles, 5 de diciembre de 2012

dijo Briceño.


“Juanes estaba sorprendido por lo que le había pasado, se sentía mal conmigo, por lo que significa la canción. Le dije que no se preocupara, más allá de interpretarla, es la intención de honrar el pueblo donde está cantando”, dijo Briceño.
Para Yesid Castro, arpista llanero que lo acompañó en tarima, la presión de la gente y una desconcentración le hicieron cometer errores. “A mí me ha pasado, son cosas de 5 segundos. Cuando uno oye que un público es afinado, con buena medida rítmica, como ocurrió en Villavicencio, empieza una presión que se hace más grande de lo normal. Sin embargo, el gesto de invitar a un folclorista al escenario y cantarle a un pueblo su folclor es algo para agradecer”, agregó el arpista.